Diligencia debida. Gobernanza empresarial responsable para las personas y el medioambiente
El 5 de julio se publicó en el Diario Oficial de la Unión Europea la Directiva (UE) 2024/1760 del Parlamento Europeo y del Consejo de 13 junio sobre diligencia debida de las empresas en materia de sostenibilidad. La llamada CS3D.
Esta directiva tiene por misión extender las prácticas de conducta empresarial responsable en las cadenas de valor mundiales para evitar y abordar los impactos negativos derivados del comercio en los derechos humanos y el medio ambiente.
Los compromisos climáticos de la Unión con la neutralidad climática de aquí a 2050 y la reducción de emisiones, en al menos, un 55% de aquí a 2030 exigen cambios en la forma en que las empresas producen y contratan.
El comportamiento de las empresas es clave para el éxito con respecto a los objetivos de sostenibilidad de la UE, tanto ambientales como sociales, y para ello, la Unión da un paso más allá con normas de diligencia con consecuencias para las empresas tales como la asunción de responsabilidad civil por los daños causados por no ejercerla debidamente.
Las obligaciones de la nueva iniciativa europea se proyectan tanto sobre la actividad de la propia empresa como sobre la de sus filiales y los socios comerciales de su cadena de actividades.
¿Cómo preparase para su cumplimiento implantando un proceso de diligencia debida? Estas son las acciones principales:
- Integrar la diligencia en la política corporativa desde una aproximación basada en la identificación de riesgos.
- Detectar los impactos actuales y potenciales relacionados con los derechos humanos y el medioambiente mediante un inventariado y mapeo de operaciones y evaluación del perfil de riesgo.
- Implantar las medidas adecuadas para prevenir los efectos adversos potenciales y mitigar y/o eliminar los reales: planes de acciones preventivos y correctivos, garantías contractuales, inversiones, cambios en la estrategia, operativa y prácticas comerciales, apoyo a pymes, colaboración con otras empresas.
- Reparar los efectos adversos devolviendo a las personas o al medioambiente a la situación equivalente antes de producirse
- Comunicar de forma transparente la diligencia mediate el procedimiento interno y externo de quejas y la divulgación al público de la acción de diligencia debida.
- Adoptar y poner en práctica un plan de transición para la mitigación del cambio climático.
Tanto los nuevos deberes en materia de información corporativa de sostenibilidad como los de diligencia debida redundan en prácticas empresariales mucho más exigentes. Las empresas tendrán que responder civilmente por los daños y perjuicios, concurriendo dolo o negligencia, provocados a terceros como consecuencia de incumplimientos de sus obligaciones de prevención, mitigación y eliminación de los efectos adversos.
Seguimos pendientes de la trasposición de esta Directiva en la normativa española, mediante la aprobación del “Anteproyecto de Ley de protección de los derechos humanos, de la sostenibilidad y de la diligencia debida en las actividades empresariales transnacionales” que puede ser más estricta en cuanto a los plazos y también en el contenido de la Directiva, que es de mínimos. En estos momentos, la consulta pública está cerrada y se prevé que pueda aprobarse a lo largo de este año 2024 o principios de 2025.
Y mientras tanto, ¿Por dónde empezar? Primero hay que valorar el ámbito objetivo de aplicación para cada entidad o grupo empresarial y el calendario previsible que pueda verse afectado, pero en todo caso, desde WAKE UP! SUSTAINABILITY (WU!) os propone, como ejercicio de responsabilidad y ¡diligencia debida!, que conozcáis la Directiva y tras su estudio, decidáis iniciar acciones con estos dos pasos:
1. ELABORAR UNA POLÍTICA DE DILIGENCIA DEBIDA INTEGRADA EN POLITICAS Y SISTEMAS DE RIESGO.
2. INICIAR LA DETECCIÓN, EVALUACIÓN Y PRIORIZACIÓN DE LOS IMPACTOS mediante el mapeo de las operaciones propias, la de filiales y socios comerciales evaluando el perfil de riesgo y priorizando la detección de efectos adversos de “alto riesgo”.
WAKE UP! SUSTAINABILITY, walking together with purpose and direction.
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