Ley Desperdicio Alimentario

Ley de desperdicio alimentario: ¿Qué saber para cumplir con la normativa?

El pasado 2 de abril entró en vigor en España la Ley 1/2025, de prevención de las pérdidas y el desperdicio alimentario, marcando un hito en la gestión sostenible de alimentos. Esta normativa impone nuevas obligaciones a empresas de toda la cadena alimentaria: producción, transformación, distribución, hostelería y restauración.

¿Qué implica para las empresas?

Planes de prevención: Las empresas deben desarrollar estrategias para minimizar el desperdicio en sus operaciones.

Donación de excedentes: Los alimentos en buen estado que no se vendan deben ser donados a entidades sociales sin ánimo de lucro, garantizando la trazabilidad y seguridad alimentaria.

Jerarquía de uso: Se establece un orden de prioridad para el destino de los alimentos no consumidos: consumo humano, alimentación animal, uso industrial y, finalmente, compostaje o valorización energética

Obligaciones específicas: Bares y restaurantes deben ofrecer envases gratuitos para que los clientes puedan llevarse la comida no consumida.

Sanciones: El incumplimiento de la ley puede acarrear sanciones que oscilan entre 2.000 y 500.000 euros.

Las medidas obligatorias de esta ley serán aplicadas transcurrido el plazo de un año desde la publicación en el BOE, el 2 de abril de 2026, dando así tiempo a que los agentes implicados puedan ir adoptando medidas y ajustarse a las nuevas obligaciones y requisitos establecidos por la norma.

Esta ley no solo busca reducir el impacto ambiental y económico del desperdicio alimentario, sino también fomentar una cultura de consumo responsable y solidario.

Oportunidad para las empresas: Más allá del cumplimiento normativo, la reducción del desperdicio alimentario puede integrarse como un vector estratégico dentro de las políticas de sostenibilidad de las empresas. Al evitar pérdidas a lo largo de la cadena de valor, se optimiza el uso de recursos naturales, se pueden reducir costes operativos y contribuir a la disminución de emisiones asociadas a la producción, transporte y gestión de residuos orgánicos.

Incorporar medidas de prevención del desperdicio permite a las organizaciones avanzar en sus compromisos de neutralidad climática, economía circular y eficiencia energética, además de fortalecer su posicionamiento ante inversores, clientes y reguladores.

Aquí te contamos a qué empresas obliga y las excepciones: https://www.linkedin.com/feed/update/urn:li:activity:7316112087787708417

Accede a la ley: https://www.boe.es/boe/dias/2025/04/02/pdfs/BOE-A-2025-6597.pdf

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